Los gatos, al igual que los humanos, tienen dos tipos de dientes, los de leche y los permanentes. Y, conociendo el tiempo de erupción de unos y otros, podremos estimar la edad del gatito.
Los deciduos, también llamados dientes de leche o primarios, conforman la dentadura temporal que, pasado un tiempo, dará lugar a la definitiva. Los incisivos erupcionan a las 2-3 semanas, los caninos o colmillos a las 3-4 semanas y los premolares entre las 3 y las 6 semanas de edad. En total conforman una dentadura formada por 26 piezas.
La caída de los dientes de leche comenzará en torno a los 3 meses, y podremos darnos cuenta o no, ya que son piezas tan minúsculas que, en muchas ocasiones, son ingeridas por el propio gato sin que esto le afecte en absoluto. Quizá, con suerte, podemos encontrarnos algún diente por el suelo.
Los dientes permanentes pueden empezar a salir cuando todavía están presentes los primarios. Sin embargo, si es así, suele ser por muy poco tiempo, pues los definitivos acaban empujando a los deciduos. Los incisivos permanentes irrumpen a los 3-4 meses, los caninos a los 4-5 meses, los premolares a los 4-6 meses y los molares a los 4-5 meses. Finalmente, la dentadura permanente se conforma por un total de 30 piezas a la edad de 7 meses.
Cada diente tiene una anatomía específica dependiendo de la finalidad. Así pues, los incisivos sirven para cortar y acicalarse; los caninos para penetrar y sujetar la comida y para defenderse; y los premolares y molares para cortar el alimento en piezas que sean fáciles de ingerir. Debido a este diseño anatómico tan perfecto, el gato, como felino que es, resulta ser un extraordinario depredador.