Las nuevas terapias con células madre tienen un futuro muy prometedor en la medicina felina debido a su potencial aplicación en diferentes patologías que reducen significativamente la calidad de vida de nuestros gatos, como la gingivoestomatitis caudal, la enfermedad renal, el asma y las enteropatías.
Las células madre tienen la capacidad de poderse diferenciar en cualquier tipo celular. En gatos utilizamos células madre mesenquimales derivadas del tejido adiposo (MSCs). Se obtienen directamente del paciente que se va a tratar a través de una cirugía en la que retiramos una pequeña cantidad de la grasa subcutánea abdominal, que será procesada para obtener las células madre. La administración al paciente es vía intravenosa y en la localización afectada en determinados procesos y debe ser monitorizada de cerca para controlar posibles reacciones adversas.
¿Cómo funcionan?
Las MSCs ayudan en la regeneración de los tejidos a través de una serie de mecanismos, entre los que se incluye el contacto entre células, la producción de vesículas extracelulares e incluso la formación de nanotubos que pueden transferir factores que reparen las células dañadas. Las MSCs secretan factores bioactivos que mejoran la angiogénesis (formación de vasos sanguíneos), reducen la inflamación y tienen efecto inmunomodulador.
En el daño de los tejidos, se cree que las MSCs pueden inhibir la fibrosis y reclutar células madre locales, estimulando su supervivencia, proliferación y diferenciación.
Aplicaciones clínicas de las MSCs en patologías felinas
Dadas las propiedades inmunomoduladoras de las MSCs esta terapia es prometedora para una variedad de enfermedades inflamatorias, degenerativas e inmuno-mediadas en el gato. Se ha evaluado como tratamiento para la gingivoestomatitis crónica, la enfermedad renal crónica, IBD y asma. También se ha estudiado su uso en osteoartritis y cardiomiopatías.
- Gingivoestomatitis Crónica Felina (GECF)
Consiste en una inflamación de los tejidos que están en contacto con la saliva y la placa bacteriana. La patogénesis de esta enfermedad es multifactorial: enfermedades víricas subyacentes (destacando el calicivirus felino), alteraciones en la microbiota, pérdida de tolerancia a antígenos y alteraciones en la inmunidad. Histológicamente las lesiones se caracterizan por inflamación con predominancia de linfocitos T, lo que la hace susceptible de mejorar con terapias inmunomoduladoras como las células madre mesenquimales, que regulan la activación de estos tipos celulares. La respuesta es prometedora, consiguiendo un 72% de respuesta, sin recidivas tras el tratamiento.
- Asma
El asma felino es una hipersensibilidad a diferentes alérgenos ambientales que producen una inflamación crónica de las vías respiratorias bajas. Se caracteriza por eosinofilia, hiperreacividad y remodelación de las vías respiratorias. La aplicación de la terapia con MSCs se basa en su efecto inmunomodulador y la capacidad para llegar a pulmón cuando se administra intravenoso. En los ensayos descritos se indujo asma agudo y crónico en los gatos, siendo más eficaz en el primero que en el segundo. Sí que se consigue en casos crónicos reducir el grosor de los bronquios, indicando un efecto positivo en la remodelación de las vías respiratorias.
- Enfermedad Inflamatoria Intestinal (IBD)
Es un tipo de enterirtis crónica con un infiltrado celular inflamatorio, frecuentemente de linfocitos. Se ha probado la eficacia del tratamiento con MSCs y las mejoras en los signos clínicos se han observado entre las 4-8 semanas post-tratamiento sin efectos adversos.
- Enfermedad Renal Crónica (ERC)
La ERC es la patología urinaria más común en el gato y consiste en la pérdida gradual de la funcionalidad renal. Se han puesto en marcha varios ensayos con gatos combinando varias dosis y protocolos de administración, sin conseguir resultados claros sobre la eficacia de las MSCs en enfermedad renal. En algunos estudios se produjeron efectos adversos como vómitos y aumento de la frecuencia respiratoria. Sin embargo, en otro estudio se observó una mejora leve en la proteinuria y la densidad urinaria. Actualmente la terapia con MSCs para ERC se considera experimental.
Aunque la terapia con células madre en gatos es muy prometedora, aún necesitamos que se lleven a cabo más estudios para poder aplicarla con la suficiente evidencia científica que nos asegure su seguridad y eficacia. Actualmente su aplicación se limita a aquellos casos en los que las terapias convencionales no han dado un resultado satisfactorio, ya que es el modelo en el que se basan los estudios con los que contamos. Esperamos poder tener más información en los próximos años y así poder contar con más herramientas para mejorar la calidad de vida de nuestros pacientes felinos.